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Además de pesar a los animales, se tomaron muestras de heces y de carne para calcular la GMD, IC y determinar la calidad de la carne. También se midió el nivel de fósforo en el pienso y su digestibilidad.
Los pesos vivos inicial y final, el crecimiento, el IC y la calidad de la carne no fueron distintos entre tratamientos. La incorporación de fitasa o la inclusión de una variedad de maíz baja en fitatos redujeron la excreción de fósforo en un 25% mientras que cuando se utilizaba la variedad de maíz baja en fitatos en combinación con las fitasas se reducía la excreción de fósforo en un 54%.
Estos resultados indican que se puede reducir el efecto del fósforo sobre el medio ambiente mediante el uso de fitasas y de ingredientes bajos en fitatos, y por otro lado estos efectos son aditivos.
G. Gourley et al. Journal of Animal Science 2002. Vol 80 Suplemento 2 . p74 ref174
